Si buenas...
Como ha sido usual, hace tiempo no actualizo esto. Aún así, hoy ha llegado el día de hacerlo, y tal vez sea bueno inciiar este post con un pequeño resúmen de los meses recientes.
Pues bueno, seguí camellando en la empresa en la que estoy (ya cumpli 2 años! cómo vuela el tiempo), y en inicios de Diciembre me fui a Medellín para la fiesta de la empresa; quedamos con un colega de allí para quedarnos un par de días más para ir al concierto de Discharge... y lo cancelaron, top kek. Total, igual nos quedamos allí y estuvo muy bacano. En lo de la empresa nos alojaron en hoteles magníficos y por nuestra parte nos quedamos en un buen lugar, cerca a una zona llamada Belén/Laureles, con unos árboels inmensos y unos ríos muy parchados. Allí en Medallo fuimos a un par de bares metaleros (Retro y la House of Demons), y digamos que en general estuvo todo bien.
También, después de muchos años por fin conseguí una novia, y aunque al inicio hubo unas trancas parece que las cosas van bien. No me siento bien hablando de ella aquí, así que no diré mucho, pero diré que se siente bonito poder sentir ese apoyo y afecto luego del anhelo constante de aquel tiempo. Mi amigo Usechemón se casó y fuimos a la boda, y aunque se me fue un billete largo en el alquiler de los trajes y el sobre de la lluvia de sobres, estuvo muy bien ver a mi amigo feliz y contento, y poder reencontrarme con otros de mis compañeros. La parranda estuvo buena, aunque los animadores mintieron porque dijeron que iba hasta las 6 AM y como a la 1 ya nos estaban echando xD, pero se gozó.
El fin de semana pasado fui a la finca a pasar navidad con mi mamá y mi hermano, y estuvo muy chévere. Fue bueno poder dormir largo y pleno al arrullo del arroyo, recuperar las energías y compartir con mis allegados cercanos. También jugamos un juego de mesa de tipo escape room, sobre escapar de una tumba de un faraón. ¡Estuvo difícil, pero lo logramos luego de unas 4 horas! Buenos rompecabezas.
Y bueno, me devolví para camellar por aquí y continuar con mis responsabilidades, y por buena fortuna recibí mi premio de llenar el pasaporte del Irish, que fueron 2 pines y una caja de 16 polas! Yay!
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Y bueno, llegamos al motivo del post. Como hace unos meses escribí sobre mi gata Arwen, hoy es el día de hablar sobre Félix, a quien decidimos con mi familia a poner a dormir y hoy fue el día en que abandonó el mundo. A diferencia de Arwen, con Félix era algo que ya pensabamos que podía suceder tarde o temprano, pues estaba viejito y con muchos problemas de salud (displacia de cadera que le había deformado la columna, y le dificultaba mucho el movimiento: para esto le teníamos un tratamiento contra el dolor de CBD medio reciente que creo que le ayudó mucho; también problemas de que, auque comía ávidamente, le generaba un malestar luego de comer, y olía medio fétido en su aliento; le salían muchas pichas en los ojos; y se quejaba constantemente). También, sobre todo, la ausencia de la gata le afectó mucho, y si yo me iba se ponía a llorar bastante, para no quedarse solito...
Total, aunque no fue una decisión fácil de tomar, sí había pensado que al menos hoy (día delos Inocentes) era una buena idea para su despedida, y logré coordinar para que se pudieran despedir de él mi madre, mi novia y mi hermano. También me puse la misma camisa que tenía cuando pasó lo de la gata, la cual no había tocado en estos meses y había dejado especialmente para esta ocasión, a fin de unir los dos hechos y, aunque sea, unirlos con los pelitos que quedaron en ella.
Al agendar la cita en la veterinaria (donde se hizo lo de Arwen) pensé que había inconvenientes, porque me pidieron una remisión de veterinaria, pero hoy me atendió la misma doctora que lo había revisado la vez pasada que lo llevé (aunque tenía el pelo de color distinto y no la reconocí). Me dijeron que era un candidato válido para la eutanasia, y que en este caso se podía proceder porque se veía que por la edad avanzada (tenía unos 18 añitos) ya los problemas no iban a mejorar, sino que iba a seguir empeorando lentamente y era mejor idea evitar prolongarle dolor y malestares.
Así que bueno, por fortuna los Dioses me concedieron que, al igual que a la gata, en el momento necesario hiciera solecito (llovió un montón antes) para que pudiera estar tranquilito en el jardincito de la veterinaria, que pudiera explorar allí un poco y despertar parte de esa naturaleza exploradora y de "fierita" que sienten los gatos al estar en el pasto (cosa que no les pude proveer al tenerlos aquí en el apartamento, a pesar de tenerles espacio y la terraza con sus plantas), y aunque ayer y antier estuve llorando constante, y hoy también luego de que falleciera, estoy tranquilo de que tuvo un deceso pacífico y tranquilo y que sin duda se veía muy tranquilito ya libre de dolor, descansando sub umbras (o, como quisiera pensar, en el Cathalla).
Así que aunque ahorita llegué a un apartamento vacío y probablemente llore más tarde cuando me vaya a dormir, creo que esto fue menos trágico que lo de la gata, tal vez porque ya se veía venir; no fue algo que pasara sin tristeza, como lo son las despedidas de los seres que amamos y que nos han acompañado tanto tiempo; incluso de aquellos cuyo afecto llegamos a despreciar u obviar en ocasiones de irritable intolerancia, ahora solo queda el lamento de los errores cometidos... pero es algo que ha pasado y que, tal vez, como dice esa canción de Kingston Wall: "...something new bornS when something old dieS..."
Así que nada: ¡Adiós, mi Félix hermoso! muchas gracias por los años que me acompañaste, y aquí también te pido disculpas por las veces que te maltraté. No faltarán los días en que ahora extrañe aquellos maullidos tuyos ni tus ronroneos, ni tu capacidad empática de venir a arruncharte cuando estaba desolado, pero espero que ahora, en un plano mejor, seas libre de los malestares de este mundo horrible, y recuerdes que te quise y te quiero. Y espero que puedas reencontrarte con Arwen y con Sarita, para ronronear y jugar más allá de los sueños.
Eso es todo por el momento...
Vemos,
Suerte
Pems
